


Psicotécnicos. Conducir embarazada: lo que opina el médico
¿Se debe conducir embarazada? Se trata de una pregunta que se han hecho miles de mujeres tras conocer que van a ser madres. No hay una respuesta única. Y aunque es una decisión individual y en la respuesta entran miles de variables, los médicos advierten de los posibles riesgos Para el doctor Óscar Martínez Pérez, del grupo de simulación obstétrica y ginecológica del Hospital Puerta de Hierro de Madrid, en teoría no hay una semana a partir de la cual no se puede conducir embarazada, pero está el sentido común y es preciso que se sienta cómoda haciéndolo y que siga unos determinados consejos de seguridad. Hay pacientes, señala, que ya se sienten muy pesadas con un mes de embarazo y otras que no, y lo importante “es no conducir mucho tiempo ni distancias muy largas”, pero añade, que no obstante, es mejor ser pasajero que conductor, y en este último caso no se debe desactivar el airbag porque si se protege la madre, se protege al feto. También observa que a la hora de decidir si coger el coche, tampoco es lo mismo una gestación única que una gemelar de 30 semanas. “Una mujer embarazada puede conducir, pero si en su trabajo es imprescindible que lo haga en largas distancias y muchos días de la semana debe considerar la oportunidad de pedir una baja por riesgo laboral”. Su grupo de Puerta de Hierro acaba de constituir un equipo de investigación con los bomberos de la Comunidad de Madrid para llevar a cabo accidentes simulados y establecer qué sucede, los posibles daños y cómo se debe proceder, tanto en...
Renovar carné de conducir: Las motos ya no atraen tanto a los jóvenes
El perfil del motociclista actual está cambiando, según reflejan los datos de ventas desde los años previos a la crisis económica hasta hoy. El mercado, por su parte, ha percibido el descenso de optimismo en las ventas, tan reconocible de hace tan sólo unos años, y se ha puesto en marcha para posicionar nuevamente a la motocicleta en la movilidad del presente y el futuro. En 2007 el total de motocicletas vendidas en nuestro país se aproximaban a las 400.000 unidades y el mercado se encontraba en pleno auge, algo que queda muy lejos ahora tras el periodo de crisis económica donde el batacazo fue importante (tan sólo 107.193 unidades vendidas en 2013). Las ventas van remontando (67%) en lo que se podría denominar como un proceso de recuperación a medio plazo, pero con claros vaivenes que muestran la inestabilidad sobre la que se asienta el parque motociclista en España. Esto se debe, en parte, a la sospecha generalizada sobre el posible surgimiento de una nueva burbuja en las motos clásicas, al incremento gradual de la venta de los ciclomotores frente a las motocicletas y a la apatía de los jóvenes hacia este medio de transporte, que sin lugar a dudas, tuvo mejores días. Las matriculaciones de motocicletas siguen cayendo A pesar del ligero ascenso de este pasado mes de octubre, que da un breve respiro a la industria de las dos ruedas, la venta de motocicletas tanto en nuestro país como en Europa no remonta y van ya cuatro meses de noticias negativas. En España, el mes de octubre la venta total ha aumentado un 0,7%, es decir...
Psicotécnicos: ¿Pagamos más multas los españoles que el resto de europeos?
Existe una creencia general de que los españoles pagamos más por las multas que nuestros vecinos europeos. Y cuando se demuestra por cifras que esto no es así, se justifican las mayores cantidades de otros países por su mayor nivel de renta. Hoy vamos a ver que ni lo uno, ni lo otro. Diferencias en los límites de velocidad entre los países europeos En Europa podemos encontrarnos a día de hoy algunas iniciativas encaminadas a armonizar los límites de velocidad en todos los países miembros de la Unión. Algunos defienden la necesidad de ampliar el marco legal común, que ya ha logrado que las multas no conozcan fronteras desde hace más de diez años, y la armonización integral de las normativas de circulación, que ya ha conseguido que en Europa tengamos unos índices de seguridad vial relativamente similares. Sin embargo, otras cuestiones apuntan a que esta armonización de los límites de velocidad es claramente desaconsejable desde el punto de partida de que las condiciones de mantenimiento de la red viaria sí pueden ser muy distintas de un país a otro. Igualmente distintos son los comportamientos de los conductores europeos, y la forma que tienen de aplicar sus restricciones de velocidad (el caso más recurrente es el de Alemania). A pesar de ello, podemos afirmar que existe cierta armonización de facto en los países europeos, con límites que rondan los 50 km/h para vías urbanas, entre 80 y 100 km/h en vías secundarias, y entre 110 y 130 km/h para autopistas y autovías. Por otro lado, además del archi-debatido caso de las autobahnen alemanas, encontramos otros especialmente restrictivos como...